Antonio Santos
El matador de toros Arturo Macías ya se encuentra en su casa en donde se entregó a los médicos de plaza de la Monumental de Aguascalientes, encabezados por el doctor Enrique González Careaga.
Pero también al cariño de su madre Lilia, de su familiares, amigos y de la afición taurina, que siempre envió mensajes de apoyo al matador convaleciente.
Esther, su esposa, viajó el lunes en el avión privado del empresario saltillense Armando Guadiana Tijerina para acompañar al matador al momento de recogerlo en Chiclayo, Perú.
En un video proporcionado en exclusiva para Vanguardia por el matador, se observa cómo fue operado y atendido el diestro, y el momento el que su esposa y el aficionado José Rodríguez Luévano llegaron a Chiclayo a recogerlo para traerlo de vuelta a casa. También se puede apreciar cuando abandona el hospital en el que estuvo internado en Chiclayo, previo a su retorno a México.
Desde que llegó al aeropuerto Jesús Terán, de Aguascalientes, Macías sintió el cariño y afecto de sus cercanos y de sus seguidores, y desapareció por un momento el cansancio y dolor por el calvario de siete horas de vuelo y los días dolorosos que ha vivido desde que recibió su séptima cornada, hace ocho días, cuando toreaba en Chota, Perú.
Sin embargo, y tras el penoso trayecto desde Chota a Aguascalientes, para él lo peor ya pasó y ahora se entregará por completo a su rehabilitación.
“Tengo que dejárselo al tiempo, para que la herida sane completamente, no sé si vaya a reaparecer en Xico, Veracruz (el 19 de julio), pero ahora lo que me importa es reponerme, recuperarme y cuidarme bastante para poder reaparecer cuanto antes”, dijo Macías al llegar a su tierra natal.
El diestro, quien recibió una cornada de 18 y 12 centímetros, se recupera satisfactoriamente de la herida y no ha tenido fiebre, pero los médicos de plaza de Aguascalientes le harán otros estudios para revisar que la herida no presente complicaciones en un futuro.
“En Perú los médicos hicieron un excelente trabajo, quiero agradecerles a todos los que me intervinieron porque hicieron un excelente trabajo, y creo que con los estudios que me harán aquí confirmaré que allá se hizo un excelente trabajo”, declaró el torero, al referirse a los doctores peruanos Leopoldo Acuña, Manuel Aguilar, Mario Mestananza, Javier Cabrera y José Herrera.
Arturo Macías, recostado en el avión privado que lo condujo de regreso a México.
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